Dios y Satán luchan por el dominio del mundo, ¿de qué parte estás?
La vida de ángeles y demonios
En este apartado se detallan algunos aspectos relativos a la ambientación del juego que deberían conocerse con respecto al mundo de INSMV:
Como se organizan las Fuerzas del Bien
A diferencia de las fuerzas del Mal, caóticas y desunidas, el ejército de Dios está bien estructurado y jerarquizado.
Servidores de Dios: Representan el escalafón más bajo. Son humanos que dedican el 75% del tiempo a la plegaria y al entrenamiento durante dos años, momento en el que acaba su entrenamiento y están listos para llevar a cabo su primera misión. Durante las misiones no hay vacaciones ni tiempo libre, la suya es una dedicación completa para la Gloria de nuestro Señor. Si mueren en misión van directos al paraíso, su muerte se camufla bajo la forma de accidente para no levantar las sospehas de las autoridades humanas.
Soldados de Dios: Tras cinco años de misiones difíciles y de entrenamiento intensivo, los servidores se convierten en Soldados. Obtienen algunos poderes a cambio de desaparecer completamente del mundo de los humanos. Carecen de vida privada y son contratados por empresas tapadera, normalmente en trabajo para los que se requiere el permiso de armas.

En la tabla siguientes podéis ver algunas entidades y grupos organizados típicos entre las fuerzas del Bien ( y el presupuesto del que disponen en ptas... es un juego de los 90s, ja ja):


La mayor parte de las organizaciones que mantienen el orden sobre la Tierra están más o menos dirigidas por las Fuerzas del Bien. La siguiente lista os dará una idea más exacta de dicha participación aunque los valores pueden variar de un país a otro. Lo cierto es que 1 de cada 100 policias, curas o militares es un ángel, ¡¡¡están por todas partes!!!
Clero: El 20% de los miembros del clero lo forman parte del ejército de Dios (15% servidores, 4% soldados, 1% ángeles). El 99% de los miembros del clero pueden ponerse en contacto con las fuerzas del Bien.
Ejército: EL 10% de las fuerzas armadas forman parte del ejército de Dios (9% soldados y 1% ángeles). Apenas el 25% de los restantes pueden contactar con las Fuerzas del Bien.
Policía: El 15% de las fuerzas del orden forman parte del ejército de Dios (10% servidores, 4% soldados, 1% ángeles), el 50% de los restantes pueden contactar con las fuerzas del Bien.

La presencia casi permanente de seres humanos venerando a Nuestro Señor permite a los lugares santos adquirir propiedades que hacen de ellos una fortaleza, estos lugares utilizan poderes frente a las criaturas maléficas. Cuanto más antiguo es el templo, mayor es su poder.
La ley es quizás la mayor aliada de las Fuezas del Bien. Así que una buena parte de los representantes de la ley son, o criaturas controladas por los ángeles, o criaturas de Dios directamente. Un Ángel nunca tendría que tener problemas con la Ley y la Justicia.
Como se "organizan" las Fuerzas del Mal
Los demonios básicamente no se organizan.
Deberán tener mucho cuidado a la hora de usar sus poderes, los investigadores especializados de los ángeles están siempre al acecho para detectar la posible presencia de Demonios, evidentemente estas investigaciones nunca se hacen públicas y tiene como único fin la destrucción de uno o varios demonios. Para no tener sorpreses desagradables es importante recordar que todo representante de la ley está relacionado directa o indirectamente con las Fuerzas del Bien.
NOTA: A partir de que un Demonio empieza a tener problemas con las autoridades de un país, acumula puntos e culpabilidad. A partir de cierto número, las Fuerzas del Bien empiezan a interesarse por el sujeto en cuestión.